MAL KÄRMA
Desde las profundas y resonantes calles de Cocentaina, en la soleada, pero ardiente Alicante, emerge una banda que ha venido a romper moldes y a sacudir la escena del rock urbano. Esta formación no es simplemente un grupo de jóvenes tocando instrumentos, sino un estallido de emociones crudas y realidades que todos hemos vivido. Cuatro almas inquietas unieron fuerzas, sin siquiera recordar su nombre en ese primer ensayo, pero sabiendo que lo que estaban creando sería especial. Desde ese momento, MAL·KÄRMA se convirtió en un nombre que promete, y entrega, energía pura y vital.
- Victor Semper “Vladi” es el bateria.
- Saul Ribera “Haw” bajista.
- Josue Ribera es el guitarra solista.
- Ernesto Nacher voz y guitarra ritmica.
MAL·KÄRMA es rock urbano en su esencia más sincera. Sus canciones son como un espejo roto que refleja la intensidad de la vida: amor que arde, desamor que devora, la euforia de la juerga, la sombra de la depresión y la rabia que retumba en el pecho. Y, por supuesto, el “mal karma”, ese peso invisible que todos cargamos. Pero no solo se quedan en la superficie, su música busca profundizar y conectar, golpeando justo donde la emoción es más real.
El primer gran golpe de la banda llegó con el lanzamiento de su EP, JOUSKA [Parte 1], el 23 de junio de 2023. Este trabajo, compuesto por cinco temas elegidos de un repertorio aún más amplio, se erigió como un grito de guerra que resonó en escenarios locales, provinciales y hasta nacionales. JOUSKA no es solo un nombre; es una invitación al diálogo interno que consume y mantiene despiertos a quienes se dejan llevar por su sonido. La respuesta del público fue un claro mensaje: había hambre de rock auténtico y MAL·KÄRMA estaba listo para servirlo.
La banda no tardó en subir a escenarios más grandes, y el momento clave llegó en octubre de 2023, cuando tomaron por asalto la Fira de Tots Sants, un evento legendario en Cocentaina. Allí, ante una multitud enardecida, demostraron que no estaban para medias tintas. Su presentación fue un despliegue de potencia y pasión que dejó claro que habían llegado para quedarse. Fue una actuación que marcó un antes y un después, dando al cuarteto el impulso necesario para emprender una gira que los llevaría a recorrer pubs, salas de conciertos y antros donde el rock se respira en el aire. Lugares donde la cerveza se mezcla con el sudor y cada acorde es un desafío a la monotonía.
Pero no todo ha sido glamur ni escenarios grandes. MAL·KÄRMA ha tocado en sitios donde la supervivencia era casi un deporte extremo, recogiendo rápido y saliendo de allí con historias que contar. Esos momentos de incertidumbre han cimentado la identidad de la banda y han fortalecido su vínculo, porque para ellos, la música es mucho más que acordes; es un pacto entre hermanos. Han compartido escenarios con bandas afines, creando lazos que van más allá de lo musical, alianzas que les han enseñado que el verdadero rock se construye en conjunto y que la escena es más fuerte cuando se apoya mutuamente.
El 2024 y 2025 ya están en el radar de MAL·KÄRMA, con una agenda cargada de fechas que prometen llevar su música a cada rincón posible. Pero no se detienen ahí. Ahora están trabajando en la esperada segunda parte de JOUSKA, un proyecto que promete ser aún más visceral y potente que su predecesor. Este nuevo trabajo será el broche de oro que cerrará el primer capítulo de su historia, un capítulo que, aunque aún joven, ha dejado huella en quienes han tenido el placer de escuchar sus acordes.
Aspirar a ser reconocidos en el panorama del rock nacional es una meta ambiciosa, pero si algo ha demostrado MAL·KÄRMA es que no temen a los grandes retos. Cada reproducción de sus temas, cada comentario en sus redes sociales, cada grito de apoyo desde el público, les recuerda que el camino, aunque duro, está plagado de momentos que valen la pena. Cada aplauso es gasolina para su fuego interno, una chispa más en su deseo de llevar su música lo más lejos posible, pero siempre con los pies en la tierra, conscientes de que el éxito no es un sprint, sino una carrera de fondo.
MAL·KÄRMA no solo es música, es una declaración de principios. Estos cuatro músicos no son simplemente colegas; son una familia que ha elegido caminar junta, enfrentando cada obstáculo con el pecho erguido y las guitarras listas. Como cierre perfecto para su declaración de intenciones, la banda cita un fragmento del poema Seguiré Caminando de Manolillo Chinato,que dice asi:
Seguiré caminando por el quebrajoso camino de estos sueños míos.
Pararé de vez en cuando para sacarme de las albarcas chinas y guijarros.
Limpiaré con mi manga desilusionada el rojo sudor de mi frente ilusionada.
Apartaré las zarzas del camino, sacaré alguna espina clavada en mi carne y
comeré negras zarzamoras para aliviar mi alma.
Tema que encapsula su espíritu indomable, la promesa de seguir adelante, arrancando las espinas del camino y levantándose cada vez que el suelo los llame.
Si aún no te has sumergido en el mundo de MAL·KÄRMA, prepárate, porque no solo es un viaje de riffs poderosos y letras que golpean, es un viaje al núcleo de lo que significa vivir con la intensidad de un acorde bien ejecutado. Y que quede claro, esto es solo el principio. MAL·KÄRMA está aquí para quedarse, y con cada presentación y nuevo proyecto, demuestran que su nombre, y su legado, apenas comienzan a escribir una historia que retumbará por mucho tiempo en la escena del rock nacional.
- Dirección: 03820 Cocentaina (Alicante)
- E-mail: malkarmaband@gmail.com
- Web: https://linktr.ee/malkarma_rock